sábado, 25 de junio de 2011

En ese juego sobre el filo de la navaja, al borde del precipicio, los demás sentían vértigo ante él, y ese vértigo alimentaba su antipatía. Su libertad tenía un precio, por ella experimentaba ese furioso resentimiento contra su persona. Lo que llamaban su falta de fe o de moral no era a menudo más que el reflejo de un deseo inconfesado de parecérsele. Incomodaba al poder al mismo tiempo que lo servía, era rebelde a toda forma de autoridad. Si, Pietro era un hombre libre.
Sin duda era eso lo que inspiraba miedo.
Él sabía que, en el fondo, el perfume de escándalo que rodeaba su personalidad era tanto fruto de sus actos como de la frustración secreta de sus detractores.

                                                     "El noveno círculo"

Este fragmento pertenece a un libro maravilloso que se ambienta en pleno siglo XVII en Venecia. Muy interesante.
Lo que más me gusta, es que Pietro era un hombre libre. Pero muchos estaban en su contra y durante un tiempo privaron a la Orquidea Negra de su bien más preciado, de algo que a ningún hombre le debería de faltar: la libertad. 
Hoy, viendo la televisión, han sacado la manifestación de "los indignados" en Madrid, en su marcha hacia Neptuno. Una pancarta ha llamado mi atención, decía algo parecido a esto: Si los de abajo se mueven, los de arriba se tambalean.
Es muy cierto. No podemos dejar que hagan lo que crean que es mejor para nosotros si no saben en que situación nos encontramos. No debemos conformarnos cuando unos gobernantes proponen unas reformas para mejorar, cuando lo que realmente van a hacer es terminar de hundirnos. 
No le encuentro sentido cuando la policía detiene una marcha pacífica (como hace unas semanas), realmente no lo entiendo, ¿que es entonces de nuestra libertad? ¿que ocurre entonces con nuestra voz?

Hasta la próxima ^^

1 comentario:

  1. Churriiii :)

    Me lo has puesto difícil para comentarte en esta entrada, ya sabes que entre que soy de letras y medio Nancy Rubia, mis neuronas no dan para tanto :P

    Sólo puedo decirte que mucha gente piensa igual que tú, entre ellos yo, y mientras esa gente tenga un espíritu crítico sobre el estado de las cosas y no se conforme, no toda la esperanza estará perdida, siempre será posible un cambio hacia una sociedad mejor.

    Bueno niña nos vamos a Cádiz o qué? Al final me voy a quedar con recomello, ya verás. Sea como sea, estemos en la carrera que sea, i love you.

    Un besito muy fuerte preciosa!

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